Si eres un amante del queso y te gustan las historias con sabor, no te pierdas este artículo sobre el queso Ladrillo de la calle Detroit. Descubre cómo una pequeña empresa familiar ha logrado mantener viva la tradición de este delicioso queso, que tiene su origen en la ciudad de Detroit. Conoce su historia, sus características y cómo puedes disfrutarlo en tu próxima degustación. ¡Prepárate para saborear!
Ladrillo de la calle Detroit
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Elaborado con leche pasteurizada de cabra
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País de origen: Estados Unidos
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Región: Ann Arbor, Míchigan
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Tipo: suave, artesanal
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Textura: desmenuzable y suave
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Corteza: florida
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Color: marfil
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Sabor: limón, salado, especiado, ácido
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Aroma: terroso, especiado
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vegetariano: no
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Productores: Zingerman’s Creamery
Derivado de su nombre de la calle en la que Zingerman deli’s, Detroit Street Brick es un queso ganador de múltiples premios. Elaborado con leche de cabra pasteurizada, tiene una crianza de 2 a 5 semanas. Los granos de pimienta verde recién molidos imparten un sabor especiado y sabroso al queso respaldado por una asombrosa terrosidad y motas de pimienta en todas partes.
Marida maravillosamente con vinos blancos, como el Sancerre. Detroit Street Brick se puede servir en rebanadas, derretido sobre hamburguesas.
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Ladrillo de la calle Detroit: un queso con historia
El queso Ladrillo de la calle Detroit es un queso con mucha historia y tradición. Se produce desde hace más de 100 años en Wisconsin, Estados Unidos, y debe su nombre a la forma rectangular y plana que recuerda a los ladrillos de construcción.
Elaboración
Este queso se elabora con leche de vaca cruda y se cuece a una temperatura alta para obtener una textura firme y un sabor un poco salado. Después se prensa para darle la forma característica y se deja madurar durante al menos un mes.
El resultado es un queso de pasta amarillenta, firme pero suave, con pequeños agujeros y un sabor agradable y equilibrado.
Consumo
El Ladrillo de la calle Detroit es un queso muy versátil en la cocina. Se puede consumir solo, con un buen pan y un vino tinto, o bien se puede utilizar en numerosas preparaciones.
Es ideal para gratinar, en pizzas, en sándwiches o en ensaladas. También se puede rallar y utilizar como si fuera un queso parmesano en pastas y otros platos.
En definitiva, el Ladrillo de la calle Detroit es un queso que no puede faltar en nuestra despensa si somos amantes del queso y la buena gastronomía.
¡Disfruta de este queso histórico y sabroso!