Baladi es un queso blanco suave que se originó en el Medio Oriente y es popular en el Líbano. Se le conoce como Jibneh Baladi (Baladieh) o Jibneh Khadra en árabe. En un idioma local, Baladi significa queso local elaborado con un rebaño de cabras ‘baladi’. Alternativamente, también se le llama el ‘queso de las montañas’ porque los pastores locales lo elaboran en las altas montañas de todo el Líbano. Una versión casera de este queso es más cremosa y fresca.

Dado que Baladi está hecho de una mezcla sin pasteurizar de leche de cabra, vaca y oveja, debe consumirse dentro de los tres días. El queso parece similar al Akawie pero tiene una textura más densa. Es un queso tierno sin madurar con un sabor dulce y ligeramente salado. Este queso artesanal se puede comer con pan local o servido con un chorrito de aceite de oliva y hierbas frescas.